Durante el primer mes, recibimos varios proyectos que se fueron sumando al Directorio de Proyectos Clásicos Independientes.
Salvo alguna sorpresa puntual, la gran mayoría de los artistas ó agrupaciones que se registraron adolescen de problemas tan comunes como fatales.
Enumeraré los cinco problemas más relevantes y dejaré para el próximo artículo distintas estrategias para su abordaje y solución.
1. No tener identidad
Vamos a comenzar definiendo la identidad como la representación o imagen conceptual que un espectador tiene de una organización ó proyecto.
Tal como nuestra identidad como seres humanos no la define nuestro DNI sino aquellas particularidades que nos hacen inconfundibles: nuestro aspecto, la manera en la que hablamos, la manera en que caminamos, nuestro lenguaje corporal; los emprendimientos necesitan también elementos que los hagan únicos y que éstos sean comunicados eficientemente. Si somos pianistas por ejemplo, qué nos diferencia de otros cientos de pianistas más allá de nuestra capacidad y habilidad?
Yuja Wang por ejemplo, es una pianista clásica china que destaca no sólo por su histrionismo sino por su cuidado aspecto físico y su vestuario. Tranquilamente podría pasar por modelo ó Instagramer fitness antes que por una pianista clásica. Ese elemento le permite hacerla absolutamente inconfundible y la conecta con una audiencia más heterogénea que eventualmente se interesa por ella primero por su aspecto y luego tiene oportunidad de deleitarse con su trabajo.
2. No tener cuidado en la imagen
Una vez que tenemos definida una imagen, es importante comunicarla a través de distintas piezas de comunicación que requerirán de un diseño visual. Nuestro sitio web, nuestros perfiles de redes sociales, nuestra manera de hablar en público, de dar entrevistas. Todo debe tener un hilo conductor y ser consistente y coherente a través de todos los canales que utilicemos.
3. No tener material audiovisual de calidad
No es optativo, es absolutamente fundamental tener cantidad y calidad de fotos, video y grabaciones. No cuidar aspectos como la resolución, la iluminación, las locaciones ó la captura de audio es algo grave.
4. No pensar en digital
Año 2018 y sigo leyendo la palabra «gacetilla», palabra que refiere a otras épocas cuando la audiencia era lectora de prensa impresa.
Vivimos una era digital pero seguimos queriendo comunicar como en la era analógica. No desarrollar piezas de comunicación y estrategias de comunicación centradas en las redes sociales es un error fatal.
5. No tener conocimientos de producción musical y marketing
Sería fácil culpar a los conservatorios ó universidades pero lo cierto es que es no tener un conocimiento es fruto de una falta de inquietudes.
Dar por hecho que somos músicos y «no nos ocupamos de esas cosas» es, lamentablemente, un pensamiento erróneo y común.
Carecer de conocimientos de producción musical y de marketing son algo faltal para cualquier músico que pretenda vivir de su actividad artística ó minimamente alcanzar esporádicamente una audiencia.